Pa las Quimera Rosa que han enrosecido nuestras paredes.
Sus cuerpos libres y críticos, saciables e insaciables, siempre dispuestos a descubrir, a darte a descubrir, a mostrar sus quimeras con toda la libertad de la que son capaces a cambio de ¿Amor? Si de amor, por eso Quimera y por eso, Rosa.
Han sido generosas con su arte, con su forma de hacer, de expresar. Consecuentes con sus sueños, valientes por autonomasia.
Nos han enseñado el sonido del latir de nuestros cuerpos, han puesto en nuestras manos soldadores de estaño y eléctronica fácil, sencilla y para toda la familia y han creado un ambiente tan cercano y amable, que hasta he vuelto a creer en el arte.
Y me da a mi, que ellas no sólo hacen arte para performance, que van un poco más allá, que hacen arte para la vida.
Eskerrik-asko Quimeras ¡vuelvo a soñar!
Verónica Mas.